Escrito por Eduardo M Romano el 11 marzo, 2014
Son memorias profundas,
que han quedado en algún lugar ,y con distinta
intensidad, dentro nuestro…antes de que hubiera palabras..
…son tantas y de tan distinta índole, que ya les he perdido
la cuenta y no me atrevería a intentar
ninguna clase de listado preciso ni de recuento perfecto.
Cosas vividas en nuestros principios,
y que se las han arreglado para continuar sobreviviendo…
…por ejemplo en estos modos y no otros,
que tenemos de imaginar,pensar,fantasear o encarar
los asuntos con otra gente…situarnos de una determinada
manera antes ciertas circunstancias, mostrar este semblante
que nos caracteriza..
..acentuar las palabras con este gesto y este tono,
que alcanzan para pintarnos como de cuerpo entero.
En esta clase de cosas , parecen sobrevivir
estas memorias profundas
que les estoy diciendo.
Dialectos huérfanos de palabras que siguen
habitando y discurriendo con
tanto arraigo en nosotros..
y que retornan, cada vez que pueden,
en este modo de posicionarnos y en cada una
de las tan distintas formas
que cada quien tiene
de mostrar y dar a entender
lo propio.
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