Esa insistencia de aquello que ha sido.

Sabía que era tanto el tiempo transcurrido,

que ya no se dejaban ver muchas de sus razones

ni de sus brillos.

Sin embargo,algunos de los fragmentos

de esos recuerdos,

no renunciaban a despabilar, según sus modos,

a la  propia Conciencia.

Bien mirados,  parecían ser lo  más cercano

a una especie de renacer

de lo que ya ha sido.

Es posible que de estas memorias sueltas,

se hayan perdido 

buena parte de sus razones, tonos y acentos.

Puede ser que poco permanezca 

de aquello que  fueron urgencias y 

furiosos  entreveros.

Sin embargo,continúan sobreviviendo en Nosotros,

aunque nada tengan que ver

con una crónica limpia ni prolija

de lo acontecido.

Más bien son fragmentos reprimidos

que retornan impacientes

con distintos rostros

y de muchos otros modos.

Tal vez, para  no rendirse al silencio,

o claudicar ante el olvido.