Escrito por Eduardo M Romano el 5 julio, 2014
Me acuerdo que me dijo que no es verdad
que a cada rato y todo el tiempo,
andemos por el mundo, siendo exactamente
idénticos , como una infinita réplica
de lo que fuimos antes.
Como si los intervalos que componen el hoy,
pudiera asegurarse que serán lo mismo,
punto por punto,
a lo que vaya a saber uno
qué cosa podrán ser mañana
Eso podrá ser en lo abstracto. Pero en lo que
hace a la vida común de todos los días,
las cosas son bien diferentes.
Porque nos vemos involucrados, todo el tiempo,
en ocasiones, contextos y circunstancias
de la más distinta índole.
Así aparecen topologías inciertas,
significados que están sin que nos demos cuenta.
Motivos que sólo podemos ver
cuando existe esa perspectiva
que da el tiempo…También sentimientos
que comienzan a adquirir peso y nombre propio,
sin que podamos acertar por qué ,cómo ni dónde,
es que habrán podido extraer su sentido y su fuerza….
..y no se trata nada más que de oposiciones,
censuras o mandatos que van discurriendo
entre la razón y el sin sentido.
También están los espacios en blanco, los destiempos
y aún las mismas palabras
que siguen ahí donde habían estado…
…pero que ahora empiezan a significar
y querer decir,
distinto.
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